Simple, pero elegante, casual pero chic. Lo que parece un conjunto de palabras es en realidad la definición de la simpleza que implica ser minimalista. Esta corriente artística que ha venido para quedarse, invita cada vez a más novias a incorporar el término a sus vidas pero sobre todo al inicio de su nueva vida, así es que nacen las bodas minimalistas.
El minimalismo como estilo de vida difiere mucho del minimalismo como arte. He aquí mi dilema: ¿las novias que optan por una boda minimalista buscan romper los esquemas artísticos o sus vidas ya forman parte de esta tendencia? Si te interesa saber la respuesta, quédate hasta el final.
Primero lo primero: ¿Qué es el minimalismo?
El minimalismo es una tendencia global muy actual que busca de simplificar la vida, de aferrarse a lo esencial para vivir, ni más ni menos. Esto puede sonar muy radical, quizás al punto de acordarnos de los budistas del Tíbet al decirlo así, pero nada que ver. Aferrarse a las cosas materiales ya no es la norma, aunque el celular siga siendo imprescindible, la idea es liberarse de la carga material impuesta por el consumismo.
Esta tendencia busca ayudarte a definir que es lo que realmente te hace feliz y qué es lo que de verdad necesitas para vivir, sin dejar a un lado la posibilidad de disfrutar ciertas cosas. El minimalismo se define como una forma de ser, de actuar y de tener. Es la esencia de la persona en su máxima expresión.
Minimalismo como arte
Estamos claros que esta tendencia es muy espiritual, si lo llevamos al nivel artístico, podríamos decir que la pintura y la escultura son los principales canales para expresar esa esencia. Cuando se trata de decorar, los colores sobrios son la norma. Recuerda la expresión “menos es más” pues aquí aplica al 100%.
La clave decorativa a nivel arquitectónico es el espacio. Cuando se decoran lugares, cada objeto debe representar una cosa, se debe ser claro y preciso en su razón de ser o estar. Cada cosa material debe tener un por qué, ya que su influencia a nivel sentimental, psicológico o visual impacta, tan sólo con su presencia.
¿Cómo aplicar el arte minimalista a una boda?
Debemos olvidarnos de las bodas excéntricas, aquí lo importante es recalcar la simpleza. Cuando aplicamos la de “menos es más” conseguimos elegancia y esto debe empezar por el vestido de novia. La clave es usar cortes y seda, nada de adornos ni colores, sólo usando el blanco más puro que hay. Si quieres una buena referencia, piensa en el vestido de bodas de Megan Markle.
Para las invitaciones de boda usaremos dos tipografías, una script y una sans serif, así combinas la elegancia de la caligrafía con lo básico. Igual debes pensar que los anillos de boda deben ser lisos y que el pastel de boda debe ser muy básico, es decir, sin casi o nada de adornos.
Recuerda que artísticamente, todo debe tener un por qué. Piensa en su mínima expresión qué es lo mínimo que necesitas para llevar a cabo la celebración de tu gran día. Eso no quiere decir que no se logre un ambiente de ensueño, de hecho, una buena decoración de luces puede ser la solución.
Decorando bodas minimalistas
Las bodas minimalistas buscan colores muy básicos, empezando por el blanco para luego combinarlo con un color sobrio como beige, marrón, azul marino o verde oscuro. La clave está en no combinar más de dos colores, pues le resta elegancia.
La delicadeza es otro punto a favor de este tipo de decoración, para lograrlo, piensa en flores que sean prácticas y que combinen con el blanco. Evita montar mesas redondas, si mantienes una misma forma de decoración la simetría es más fácil de lograr. Seguro las mesas imperiales te van a fascinar, decoras menos y mantienes un mismo estilo en cada asiento.
Las bodas místicas o bohemias pueden quedar muy bien combinadas con el minimalismo, así que piensa en eso si quieres agregar una temática. Opciones decorativas que lleven geometría, dorado o morado pueden caer perfectamente aquí. También aprovecha el uso de espejos para crear más ambiente y luz.
Ahorrar en bodas minimalistas, ¿Se puede?
El minimalismo se acerca a lo mágico, a lo clásico e incluso a lo más ecológico. Una de las razones por las cuales las novias se van por este estilo es por el ahorro, al reducir tus objetos decorativos o tus elementos, terminas ahorrando mucho en gastos innecesarios y aún así tener una linda boda.
Aunque se piensa en las bodas minimalistas como una forma de ahorro, su concepto va más allá de ahorrar, se trata de un estilo de llevar la vida. Por eso, si tu intención es simplemente apegarte a la diversión sin escatimarse en gastos, te recomiendo echar un vistazo a los artículos de bodas en casa y de bodas vintage. Ambas opciones te permitirán conseguir una buena celebración sin gastar demasiado.
Y para concluir este artículo, te respondo mi pregunta inicial… creo que las novias están intentando romper los esquemas basándose en una tendencia, aunque en el fondo, su vida ya es minimalista o al menos intenta serlo.
¿Tú que opinas? Déjame un comentario.